Sudor / inhibición de las glándulas sudoríparas
La transpiración y el sudor sin duda cumplen funciones importantes
Cuando se produce una transpiración muy intensa sin motivo
¿Cómo funcionan realmente nuestras glándulas sudoríparas? O formulado de otra manera: ¿es posible inhibir o impedir el sudor, para que no se produzca en otro lugar aún más incómodo?
La transpiración es una función natural del cuerpo necesaria para bajar la temperatura corporal y eliminar el exceso de calor.
Ahora bien, el sudor también puede aparecer como una reacción del cuerpo ante determinados factores ambientales, entre los que se cuenta principalmente el estrés, o mejor dicho, distrés, estrés simultáneo procedente de diversas direcciones.
Sin embargo, la sudoración excesiva, denominada hiperhidrosis, puede convertirse para algunas personas en un problema estético que puede afectar su autoestima.
La hiperhidrosis puede aparecer en diferentes partes del cuerpo, tales como las axilas, las manos, los pies, la cara y otras zonas.
¿Existe una solución óptima para la transpiración y las glándulas sudoríparas?
La aspiración de las glándulas sudoríparas
Una opción para tratar las glándulas sudoríparas de las axilas consiste en extirparlas quirúrgicamente. Con excepción de la sudoración axilar, este procedimiento quirúrgico no es adecuado para ninguna otra zona como los pies sudorosos, las manos sudorosas u otras áreas. La aspiración de las glándulas sudoríparas, llamada también ablación subcutánea de las glándulas sudoríparas, se realiza normalmente bajo anestesia local. Durante la cirugía, se extraen las glándulas sudoríparas de la región afectada para reducir la cantidad de sudor producido. Este procedimiento es una manera relativamente segura y efectiva de tratar la hiperhidrosis. La mayoría de los pacientes constatan que la transpiración se reduce significativamente luego de la cirugía. Sin embargo, no hay que ocultar que existe la posibilidad de que las glándulas sudoríparas vuelvan a crecer, o de que las conexiones entre los conductos y las glándulas sudoríparas se regeneren. ¿Estamos dispuestos a soportar una vez más esta cirugía? El nivel de sufrimiento deberá de ser inmenso para que lo hagamos. Y no es todo, pues este tipo de cirugía también conlleva algunos riesgos, tales como infecciones, hematomas, dolor o resultados no uniformes. Antes de tomar la decisión de someterse a una extirpación de las glándulas sudoríparas, es necesario informarse a fondo. Es importante elegir un cirujano cualificado y con experiencia para que realice el procedimiento. La mayoría de los pacientes no necesitan un período de recuperación prolongado y pueden retornar a sus actividades habituales unos pocos días después. En resumen, la extirpación de las glándulas sudoríparas puede ser una solución eficaz para personas que sufren de sudoración excesiva y que no han encontrado ayuda en otros métodos de tratamiento. Si tiene interés en este tipo de procedimiento, consulte a un cirujano cualificado para saber si la terapia es adecuada para usted.
Glándulas sudoríparas
¿Qué aspecto tienen y cómo es su estructura?
El sudor sale por un canal piloso
El sudor sale a través de un poro
Conducto sudoríparo conectado con la glándula
Glándula sudorípara
Sudor – actuar sobre las glándulas sudoríparas
Las glándulas sudoríparas juegan un papel importante en la regulación de la temperatura corporal, mediante la producción y secreción de sudor.
Hasta aquí, todo bien.
Sin embargo, las glándulas sudoríparas no sólo pueden provocar problemas cuando son hiperactivas y producen sudor en exceso.
También es problemático que produzcan muy poco sudor, pues esto significa piel reseca o incluso agrietada.
La hiperhidrosis es un trastorno en el que las glándulas sudoríparas producen una cantidad excesiva de sudor, lo que puede provocar desagradables síntomas físicos o dificultades sociales.
Existen diversas opciones de tratamiento para la hiperhidrosis, incluidos los medicamentos tópicos o de vía oral, las inyecciones de la toxina botulínica y la ablación de las glándulas sudoríparas.
Por el contrario, las glándulas sudoríparas pueden ser hipoactivas y producir muy poco sudor, lo que puede provocar otros problemas de salud, como por ejemplo sobrecalentamiento y resequedad.
Algunas enfermedades como la diabetes, el síndrome de Parkinson y el hipotiroidismo pueden provocar una disminución en la producción de sudor.
Especialmente en caso de pie diabético, la persona afectada prácticamente no tendrá problemas de pies sudorosos o mal olor en los pies, ya que estos transpiran muy poco.
Existen maneras naturales para influir sobre la actividad de las glándulas sudoríparas. Por ejemplo, determinadas hierbas o alimentos como la salvia, la canela y el jengibre pueden ayudar a regular la producción de sudor.
También utilizar ropa transpirable, evitar la comida picante y el alcohol, así como las técnicas para reducir el estrés como el yoga y la meditación pueden contribuir a reducir la transpiración y el mal olor corporal.
Sin embargo, si se producen cambios en la producción de sudor (aumento o disminución) sin motivo aparente, es importante consultar a un médico. Él podrá descartar una posible enfermedad y aconsejarle opciones de tratamiento adecuadas.
Opciones de tratamiento para influir sobre las glándulas sudoríparas
- Aspiración de las glándulas sudoríparas
- Ablación de las glándulas sudoríparas
- Microondas para “cocinar” las glándulas sudoríparas
- Cirugía del nervio simpático para excluir zonas enteras de la transpiración
- Iontoforesis: utiliza una ligera corriente eléctrica para inducir las glándulas sudoríparas a producir sudor normalmente
La iontoforesis se puede utilizar en todo tipo de zonas sudorosas:
- Iontoforesis para pies sudorosos
- Iontoforesis para manos sudorosas
- Iontoforesis en las axilas
- Iontoforesis para la cara
- Iontoforesis para otras áreas



¿Dónde puede producirse la transpiración?
Las glándulas sudoríparas se encuentran en todo el cuerpo, pero se concentran en ciertas zonas
Algunas pequeñas zonas del cuerpo poseen una alta concentración de glándulas sudoríparas y causan muchos problemas cuando producen sudor en exceso.
Estas zonas problemáticas incluyen:
