Olor a transpiración
La sudoración causa olor – evitar el olor corporal y a sudor
El olor a sudor, o bien olor corporal, es un olor desagradable producido por la transpiración corporal
Cuando transpiramos, nuestras glándulas sudoríparas secretan líquido constituido principalmente por agua.
El sudor en sí no tiene olor. Sin embargo, cuando las bacterias en nuestra piel lo descomponen, no solamente se reproducen, también aparece olor debido a los productos metabólicos de éstas.
Las bacterias en nuestra piel fornan una especie de ecosistema natural conocido como microbioma cutáneo. Cuando transpiramos, creamos un entorno húmedo en el que las bacterias se pueden desarrollar. Estas bacterias descomponen las proteínas y los ácidos grasos presentes en el sudor, lo cual puede provocar malos olores.
La iontoforesis puede reducir la sudoración. Los dispositivos de iontoforesis también pueden alquilarse a bajo precio para realizar una prueba.
La fórmula de la iontoforesis es simple:
menos sudor → menor cantidad de bacterias → ¡menos olor!
Diversos factores pueden influir en el grado del olor a transpiración. Por ejemplo, depende de la cantidad y tipo de bacterias en nuestra piel, del tipo de ropa que usemos y de nuestra actividad física.
La ropa juega un papel importante en la aparición del mal olor. Cuando usamos ropa, parte del sudor es absorbido y permanece en ella. Si las prendas permanecen húmedas, constituyen un medio de cultivo ideal para el crecimiento de bacterias, las que aumentan el olor a transpiración. Se le conoce también como el síndrome del perro mojado.
Una opción para evitar el olor a sudor, es llevar ropa de materiales transpirables como el algodón o el lino. Estos materiales permiten el paso del aire y así la humedad se evapora más rápido, lo que reduce el crecimiento bacteriano. También existe una serie de medidas que podemos tomar para reducir el olor a sudor. Por ejemplo, ducharse diariamente y utilizar desodorantes o antitranspirantes. Estos productos también ayudan a reducir la cantidad de bacterias en nuestra piel y así, a disminuir el olor.
En general, el olor a sudor es un fenómeno natural causado por la transpiración corporal.
Si somos conscientes de nuestra ropa y de aplicar las prácticas de higiene correctas, podemos contribuir a reducir el olor a sudor y sentirnos más frescos y por ende, más seguros de nosotros mismos.
Bromhidrosis – cuando huele muy mal
La bromhidrosis es un término médico que se refiere a un fuerte y desagradable olor corporal
La bromhidrosis manifiesta resulta muy difícil para las personas afectadas y para su entorno.
No se puede eliminar simplemente con prácticas de higiene normales. El mal olor es provocado por la descomposición bacteriana del sudor sobre la piel en combinación con ropa contaminada y ni siquiera lavarse 20 veces con jabón suele bastar.
Tras pocos segundos reaparece el mal olor, es exasperante.
Existen dos tipos de bromhidrosis: primaria y secundaria.
La bromhidrosis primaria es una afección poco común, en la que el cuerpo produce un olor inusualmente fuerte y desagradable, a pesar de que la persona siga buenas prácticas de higiene.
Este tipo de bromhidrosis es causado por una sobreproducción de sudor en las glándulas sudoríparas apocrinas, que se encuentran principalmente en las axilas, la ingle, el ano y los pezones. Esta secreción es más bien de aspecto viscoso y lechoso, distinto del sudor normal.
Las glándulas sudoríparas apocrinas son las que producen en el buey almizclero, por ejemplo, el almizcle utilizado en perfumería.
Por el contrario, la bromhidrosis secundaria es el tipo más común, que ocurre cuando las bacterias sobre la piel descomponen el sudor. Entre los diferentes factores que pueden causarla están una mala higiene, ciertos medicamentos o enfermedades como la diabetes, o bien problemas renales o hepáticos.
El tratamiento de la bromhidrosis depende del tipo y de la gravedad de la afección.
En el caso de la bromhidrosis secundaria, cambios en el estilo de vida tales como ducharse con frecuencia, utilizar jabones antibacteriales y desodorantes, así como llevar ropa transpirable y evitar la ropa ajustada, ayudan a reducir el mal olor.
En casos más agudos puede considerarse la prescripción de tratamientos médicos, como los antibióticos tópicos u orales, las inyecciones de la toxina botulínica y la cirugía.
En general, la bromhidrosis puede ser un trastorno muy agobiante que puede afectar la autoestima y las relaciones sociales de una persona. Si las medidas de higiene normales resultan insuficientes para reducir el olor, es importante consultar a un médico para encontrar la mejor opción de tratamiento posible.



El mal olor en las axilas, pies y ropa es el tipo de bromhidrosis o mal olor corporal, causado por la descomposición bacteriana del sudor sobre la piel.
Cada tipo de bromhidrosis tiene sus causas específicas y sus opciones de tratamiento.
El mal olor en las axilas ocurre principalmente por las glándulas sudoríparas apocrinas que se encuentran en ellas. Las bacterias sobre la piel descomponen el sudor y producen así un olor desagradable.
Curriosamente, la ropa oscura tiende a tomar más olor que la clara.
Las camisetas negras ocupan el primer lugar en este aspecto.
El mal olor en los pies es causado por las bacterias que descomponen el sudor en la piel y en el calzado. El calzado y los calcetines pueden conservar la humedad, lo que favorece el crecimiento bacteriano.
Para reducir el mal olor, lávese los pies diariamente y manténgalos secos, use calzado transpirable y cambie los calcetines y el calzado con frecuencia. Los desinfectantes para calzado y calcetines también pueden ser útiles.
El mal olor en la ropa se produce cuando el sudor y las bacterias permanecen en ésta. Lavar la ropa regularmente con un detergente adecuado puede reducir el mal olor. También es importante usar ropa de materiales transpirables, como el algodón, y evitar la ropa ajustada.
En casos más graves de bromhidrosis puede considerarse la prescripción de tratamientos médicos, como los antibióticos tópicos u orales, las inyecciones de la toxina botulínica y la cirugía.
Sin embargo, ante este tipo de decisiones siempre es mejor consultar a un médico que le ayude a encontrar la mejor opción de tratamiento.
En conclusión, es importante ponerle atención a buenas prácticas de higiene. Solamente así se pueden reducir efectivamente los malos olores.
Reducir el olor – combatir el sudor
Sudor significa humedad - humedad más calor significa bacterias
Un problema especialmente en los zapatos: pies sudorosos – reducir la transpiración
